El Canto de Armónicos

El canto de armónicos es un tipo de canto meditativo y terapéutico que se caracteriza por la emisión de varias notas a la vez , mientras se emite una nota de base que se divide en diferentes sonidos de una manera parecida a como un rayo de luz se divide en distintos colores al pasar a través de un prisma.

Esta forma de canto se considera procedente de la República Tuvá (Rusia) aunque se dice que es un método muy antiguo que se remonta a los orígenes de la humanidad y que fue transmitido de generación en generación hasta nuestros días. Se piensa que era en su origen una imitación de los sonidos de la naturaleza, como el del viento o del agua de un rio.

Para los habitantes de Tuvá, el canto de armónicos tenía un significado espiritual. Según los tuvanos, tanto las montañas como los ríos y los restantes elementos de la naturaleza tienen un alma, que se manifiesta a través de las formas que adoptan y los sonidos que emiten. En su tradición existen seis técnicas de canto de armónicos: la nasal, el canto desde la faringe, el canto torácico, el abdominal, los narrativos y la voz de la flauta nasal.

Una de las modalidades más conocidas del canto de armónicos es el canto que interpretan los aborígenes australianos con el Didgeridoo, un ancestral instrumento de viento que utilizan desde hace miles de años.

Los Colores del Sonido

En Occidente, los armónicos fueron descubiertos hace unos 2.500 años por Pitágoras, que además de filósofo y matemático era un músico consumado. Estudiando el monocordio, un instrumento musical de una sola cuerda, se dio cuenta de que cada sonido está compuesto por una gran cantidad de frecuencias o vibraciones, aunque el oído no es capaz de monocordiopercibirlas.

Sin embargo, el sonido puede ser refractado al igual que la luz, para que sea posible percibirlos. Es como si los armónicos fueran los distintos “colores” de los que se compone el sonido y lo que nos permite diferenciar las distintas calidades de los sonidos. Gracias a ellos, por ejemplo, podemos distinguir entre el sonido de una guitarra y el de un violín cuando tocan la misma nota.

Cómo se Interpreta el Canto de Armónicos

Todos los estudiantes  de música aprenden los sonidos armónicos que pueden producirse con algunos instrumentos musicales. Sin embargo, el mayor instrumento musical para el canto de armónicos es el propio cuerpo humano. Un cantante de armónicos experto es capaz de ajustar su voz con una riqueza de matices que ningún instrumento podrá igualar.

El cantante emite un sonido principal que se experimenta como una vibración constante. Después, con distintas técnicas (en las que la respiración tiene gran importancia), diferentes a las técnicas vocales clásicas, la parte superior del cuerpo, especialmente el tórax y la garganta, se convierte en una caja de resonancia. Intervienen el cráneo, los conductos nasales, el abdomen y el diafragma y todas las partes de la boca que permiten canalizar el sonido de manera especial. Entonces comienza la emisión de los armónicos.

Canto de Aromonicos

Cualquiera  puede aprender el canto de armónicos, pues estos sonidos se encuentran de manera natural en la voz. En primer lugar, hay que aprender a emitir el sonido base, que es como un zumbido. Se debe emitir de manera consistente. A partir de ahí, el resto resulta relativamente fácil.

Un cantante experto puede llegar a emitir hasta el armónico 16 o más arriba de la escala armónica que es infinita dentro de cada nota, pero el oído humano sólo es capaz de percibir las cinco primeras octavas.

Beneficios del Canto Armónico

-       Equilibra los hemisferios cerebrales. Favorece el equilibrio del sistema nervioso. Ayuda a que se recarguen energéticamente las células del cuerpo. Estimula el sistema inmune. Induce la meditación profunda. Alivia los estados emocionales alterados como ansiedad o estrés.

El canto de armónicos con algunas variantes aparece en distintos lugares y culturas.

-       El canto Gregoriano se considera la primera representación del canto de armónicos en Europa. En la música sufi existe un canto terapéutico basado en el uso de las vocales. Los monjes tibetanos son capaces de utilizar hasta tres tonalidades simultaneas durante el canto de armónicos (lo habitual es emplear dos tonalidades). Los indios americanos empleaban el canto de armónicos como medio de comunicación con los espíritus de la naturaleza.